domingo, 3 de enero de 2010

Juicios vesánicos

En el alma de la tierra...

Gabriel, con sus ojos de acero y cabellos coloreados por la luna, habló. Escupió amargas frases frustradas en tono frío y lejano. Como si...

Gritos. El pueblo entero ardía. Terribles alaridos de gente en llamas. Una sola iglesia. Todos encerrados, muriendo.

Gabriel, hermoso y triunfante, sonrió y echó a andar con paso ligero hacia el corazón del bosque bajo un cielo estrellado dejando el abrasador espectáculo humano a sus espaldas.



Hoguera de San Juan

1 comentario:

bart dijo...

hola, ya hice mi blog.pero no he escrito nada.
hoy tal vez escriba algo, jaja saludos, feliz ano nuevo